Histórico por donde se lo mire. Porque fue la primera vez ante los All Blacks, porque el equipo venia golpeado y sin jugar tras el Mundial de Japón el año pasado. Y se dio nomas, con siete meses de inactividad para la gran mayoría del plantel y con un triunfo que no dejó dudas, que fue merecido por sobre todas las cosas y que quedará en la historia grande de nuestro rugby.
Lo de Los Pumas en el Bankwest stadium fue mayor a mayor. Durante los 80 minutos impusieron condiciones y no mermaron en su rendimiento ante un rival que siempre juega y te exige a fondo.
Y cuesta elegir una figura, porque el rendimiento de todos fue muy parejo. Los líderes se destacaron y marcaron presencia. Matera, Kremer y Bruni estuvieron en un nivel superlativo. Nico Sánchez metió los 25 puntos y se sacó una espina que había calado hondo en su interior tras el mundial.
Y también fue una revancha para Mario Ledesma. Cuestionado muchas veces, el ex hooker de Los Pumas tuvo su recompensa y merecido lo tiene tras el sinsabor de dos años de gestión al frente de Los Pumas.
Fue un partido histórico, que se celebra en cada club de la argentina y que sirve para seguir creyendo en que cuando se lo proponen, Los Pumas son capaces de sorprender al Mundo.
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